Tratamientos

¿ QUÉ ES UNA PSICO-TERAPIA ?

Un proceso de psicoterapia es un camino que te ayuda a recuperar tu bienestar, a encontrar de nuevo el equilibrio.

Es un tiempo que dedicas a entender qué está sucediendo a tu alrededor para que te sientas así.

Es responder a la pregunta ¿cómo he/hemos llegado hasta aquí? Entender por qué te sientes como te sientes, o porqué suceden cosas a tu alrededor que no comprendes, es clave para comenzar a cambiar tu comportamiento, clave para comenzar a mejorar.

Una psicoterapia te ofrece un lugar seguro donde hablar y desahogarte, sin que el/la terapeuta te juzgue. Nuestra función como psicólogos/as es ofrecerte apoyo y guía en un entorno de seguridad y protección, donde tus pensamientos y sentimientos son respetados y validados como legítimos. Así, podrás aprender a identificar y a manejar tus emociones, y a relacionarte con los demás de una forma distinta. En un proceso de psicoterapia, juntos/as buscamos soluciones eficaces que te ayuden a afrontar de otro modo las circunstancias.

¿Por qué invertir en una psicoterapia? Sabemos que es un proceso algo lento y costoso. Pero es el camino para que conozcas bien tus reacciones y actúes de forma libre, sin hacerte daño a ti ni a los demás.

¡Importante! Ponte en buenas manos. Recuerda que la Psicología Clínica es una ciencia, utiliza protocolos validados y su ejercicio profesional requiere de colegiación y seguro de responsabilidad civil. Un/a psicoterapeuta es un/a profesional con carrera universitaria en Psicología, máster de especialización y horas de formación teórico-práctica. En OrientaTerapia defendemos una buena práctica profesional.

 

TERAPIA INDIVIDUAL CON ADULTOS

La psicoterapia individual sirve para ayudarte a eliminar el malestar y, por tanto, a recuperar tu bienestar. Solemos pensar que necesitamos tener un trastorno grave para ir al psicólogo/a y no es así. En un proceso de psicoterapia, buscamos soluciones eficaces que te ayuden a afrontar de otro modo aquello que te impide ser feliz.

El malestar puede venir provocado por muchos motivos, y por más de un motivo a la vez. Los más frecuentes suelen ser:

  • síntomas de ansiedad
  • síntomas de estrés
  • problemas en el trabajo
  • problemas psicosomáticos (dolores físicos sin explicación orgánica)
  • sensación de desmotivación y apatía o desgana
  • dificultad para tomar decisiones
  • pensamientos que no se marchan
  • problemas de autoestima y seguridad en uno/a mismo/a
  • conflictos con la pareja
  • problemas con miembros de la familia
  • dificultades para dormir

 

Este tipo de terapia sirve además cuando uno/a se encuentra confuso/a debido a un cambio reciente en su vida, como por ejemplo la muerte de un familiar o amigo/a, una situación de separación o divorcio, mudanzas, situaciones de enfermedad crónica, inmigración.

Otro motivo por el que la psicoterapia individual está especialmente recomendada es para momentos en la vida en que uno/a siente que no quiere seguir por el mismo camino como hasta ahora. Hablamos de las crisis vitales, como la crisis de la mitad de la vida.

También es frecuente que muchas personas acudan a terapia individual sin saber qué les sucede. Simplemente sienten que no son felices, y no saben por qué.

Por último, comprobamos que empieza a surgir la necesidad de acudir a terapia individual para algunas mujeres/hombres que intentan ser madres/padres. Los ritmos de vida actuales están provocando un cambio en el concepto de la maternidad/paternidad que puede ocasionar un impacto psicológico real. Si te encuentras afectada/o por tratamientos de fertilidad, por ver truncadas tus expectativas de ser mamá/papá, por repetidos abortos propios o de tu mujer, etc. sería muy recomendable acompañarte en este proceso. Si existe pareja implicada, lo ideal sería ayudaros en pareja.

En OrientaTerapia, te guiamos para identificar qué te está dañando, y te damos pautas útiles y concretas para manejar lo que te preocupa de un modo distinto. De esta forma, aprendes a situarte en otro lugar desde el que puedes actuar de un modo diferente, protegiéndote y cuidándote.

Además de lo anterior, rescatamos tus fortalezas personales, para mejorar la relación que tienes contigo mismo/a y con los demás. Creemos que la vida es como nos la contamos, sin caer en la cuenta de que podemos contarnos la historia de un modo que no nos dañe.

Estas sesiones tienen una hora de duración y una frecuencia semanal.

No olvides ponerte en buenas manos. Recuerda que la Psicología Clínica es una ciencia, destinada a la evaluación, diagnóstico, tratamiento y prevención de las afecciones mentales. Por ello, debe ser realizada por profesionales debidamente cualificados y con experiencia, expertos/as en las técnicas que aplican y capaces de contener momentos difíciles en la terapia. En OrientaTerapia defendemos una buena práctica profesional.

TERAPIA CON NIÑOS Y ADOLESCENTES

Traer a tu hijo/a al psicólogo/a no es una tarea sencilla. ¿En manos de quién lo voy a dejar? ¿Cómo se lo cuento, qué le digo? ¿le cuento la verdad?, ¿cómo se lo tomará?…

Aunque existen muchas circunstancias que pueden darse para que decidamos llevar al niño/a al psicólogo/a, existen tres motivos estrella:

(1) Problemas en el colegio. Uno de los principales motivos por lo que está indicada la terapia con niños/as suele ser problemas en el colegio (que, a su vez, pueden estar provocados por muchas causas): bajo o muy bajo rendimiento académico, problemas de conducta en clase, problemas de integración con los/as amigos/as, dificultad para hacer amigos/as, situaciones de acoso escolar, desmotivación para el estudio.

(2) Problemas en la familia. Además de lo anterior, muchos niños/as acuden a terapia por problemas en la familia. Mala relación con los hermanos/as, celos de hermanos/as más pequeños/as, mala relación o nula con algún progenitor, rabietas.

Cuando se dan cambios en la estructura familiar, los niños/as sufren malestar por situaciones derivadas de separación y divorcio, como la aceptación de tal circunstancia y la adaptación al cambio, la aceptación de una nueva pareja del padre/madre, la aceptación de “nuevos/as hermanos/as”, mudanzas, y consecuencias derivadas de situaciones de custodia. Los niños/as se sienten indefensos/as ante estas situaciones que, en muchos casos, escapan a su comprensión.

También es frecuente traer a tu hijo/a a terapia por problemas de conducta. En ocasiones, las dificultades entre los miembros de la familia tienen que ver con que tu hijo/a insulta, no hace caso a las normas en casa, incluso muestra agresividad contra objetos, como si él/ella fuese el/la que manda en casa.

(3) Adicción a las nuevas tecnologías. Un problema creciente con el que nos encontramos es la adicción a las nuevas tecnologías. Cada vez vemos con más frecuencia cómo los/as niños/as no son capaces de hacer un buen uso de la tecnología, desregulando su emoción y su conducta. Móvil, tablet, tele, videojuegos… los recursos son infinitos. Pararlo a tiempo es la clave.

Una mención especial merecen los/as ADOLESCENTES. En ellos/as la situación se complica ya que esta etapa corresponde a una crisis vital en el ciclo evolutivo. Es decir, es uno de los momentos cruciales en la vida que les harán ir por un camino u otro. Los/as adolescentes sufren de por sí por encontrarse en esta etapa, pero todas las circunstancias anteriormente citadas les afectan intensamente.

La terapia con adolescentes está especialmente indicada cuando se dan:

  • problemas de conducta
  • adicción a las nuevas tecnologías
  • dificultades para controlar sus emociones
  • incapacidad para establecer rutinas
  • problemas de autoestima
  • problemas de alimentación
  • síntomas de ansiedad
  • ansiedad y bloqueo ante exámenes
  • desmotivación
  • consumo de sustancias
  • problemas de identidad sexual

 

En OrientaTerapia utilizamos el juego como herramienta para comunicarnos con los niños/as y algunos/as adolescentes. Mediante el juego les ayudamos fomentar su autoestima y a regular sus emociones, haciendo que éstas nos les desborden.

El juego les permite sentirse más relajados/as y hablar abiertamente de lo que les sucede mientras están distraídos/as y se lo pasan bien. De lo que se trata es de que sientan que pueden confiar en el adulto que tienen en enfrente, sabiendo que les vamos a ayudar y que no estamos en su contra, aliados con su padre y/o madre.

Además, les enseñamos a realizar un consumo responsable y saludable de las nuevas tecnologías, haciendo que se beneficien de ellas sin poner en riesgo su equilibrio psicológico ni la convivencia familiar.

Siempre incluimos a los padres en el tratamiento independientemente de la edad del niño/a. Los padres, y hermanos/as si existen, sois colaboradores imprescindibles que ayudan mucho a la mejoría del/la paciente. Además, os necesitamos como cómplices para motivar los cambios y para que nos deis feedback de cómo va el tratamiento.

Si tú quieres, siempre con consentimiento expreso de ambos padres, nos coordinamos con el colegio para una mejor intervención.

Estas sesiones tienen 50 minutos de duración y una frecuencia semanal.

No olvides poner a tus hijos/as en buenas manos. Recuerda que la Psicología Clínica es una ciencia, destinada a la evaluación, diagnóstico, tratamiento y prevención de las afecciones mentales. Por ello, debe ser realizada por profesionales debidamente cualificados y con experiencia, expertos/as en las técnicas que aplican y capaces de contener momentos difíciles en la terapia. En OrientaTerapia defendemos una buena práctica profesional.

TERAPIA DE PAREJA

Ayudamos a las personas a recuperar su bienestar en pareja a través de la negociación, la confianza y la adecuación de límites.

La terapia de pareja está indicada cuando se dan estas dos situaciones:

A) Darle una nueva oportunidad a la pareja, es decir, decidís que queréis seguir juntos. A pesar de que desde hace un tiempo las cosas no van bien, sientes que quieres intentarlo por última vez, salvando tu relación para volver a conectar con el otro.

En esta terapia, hablamos de lo que os hace daño del otro, ayudándoos a comunicaros de una forma eficaz. En pareja se aprende a negociar y a respetar las diferencias del otro.

Los motivos para hacer este tipo de terapia de pareja suelen ser:

  • problemas de comunicación: dificultad para entenderos, dificultad para llegar a acuerdos, dificultad para tomar decisiones
  • alto nivel de conflicto: frecuentes discusiones y peleas, agresividad verbal y física
  • pérdida de confianza
  • problemas con las familias de origen
  • situaciones de infidelidad
  • problemas en las relaciones sexuales
  • momentos de crisis en la pareja por una situación inesperada (muerte de un familiar, enfermedades, accidentes)

 

B) Aprender a separarse de un modo adecuado, sobre todo cuando hay menores, es decir, decidís que queréis separaros, pero no odiaros eternamente.

Aunque parezca poco importante, cuando existen menores, es un factor de protección para los/as hijos/as, que los padres puedan tener un trato cordial. A lo largo de la vida de un hijo/a se toman muchas decisiones que afectarán a su futuro. Poderlo hacer sin provocar discusión y malestar a los hijos/as, sin usarlos como mensajeros/as del otro, es crucial para su bienestar psicológico.

Esta terapia está indicada cuando:

 

  • No conseguís llegar a acuerdos
  • No conseguís tomar decisiones
  • Los/as hijos/as están sufriendo de más al veros discutir por la separación y después de ella.

 

En este caso se trabaja la comunicación y negociación encaminadas a que ambos miembros de la pareja puedan quedar parcialmente satisfechos con las decisiones tomadas a partir de su separación/divorcio. Incluso, puedan reunirse en momentos vitales de los hijos/as importantes para ellos, sin que eso suponga un gran drama (cumpleaños, graduación, etc).

Estas sesiones tienen una hora de duración y una frecuencia semanal al principio y quincenal después.

No olvidéis poneros en buenas manos. Recuerda que la Psicología Clínica es una ciencia, destinada a la evaluación, diagnóstico, tratamiento y prevención de las afecciones mentales. Por ello, debe ser realizada por profesionales debidamente cualificados y con experiencia, expertos/as en las técnicas que aplican y capaces de contener momentos difíciles en la terapia. En OrientaTerapia defendemos una buena práctica profesional.

TERAPIA FAMILIAR

La Terapia de Familia es un espacio de reunión donde todos los miembros de la familia pueden expresar su opinión para así resolver las dificultades familiares. En muchos casos, quien necesita la ayuda psicológica es el conjunto familiar, y no uno u otro, sino todos.

Este modelo de terapia es válido cuando las personas de una familia han dejado de entenderse y la situación en casa parece insostenible porque cada vez va a peor.

La Terapia Familiar está indicada ante:

  • Frecuentes e intensas discusiones los miembros
  • Problemas de relación entre hermanos
  • Situaciones de violencia
  • Problemas de comportamiento con adolescentes
  • Enfermedad física o mental y/o discapacidad de alguno de los miembros
  • Trastornos de alimentación
  • Consumo de sustancias
  • Adicción a las nuevas tecnologías
  • Dificultades de adaptación a nuestra cultura
  • Muerte de un familiar
  • Traumas familiares

 

En OrientaTerapia os ayudamos a que resolváis vuestros conflictos dándonos pautas concretas. Tratamos de detener el deterioro en las relaciones entre los miembros, para fortalecer los vínculos existentes.

Algunas veces, hay vínculos tan dañados que desgraciadamente no es posible conseguir que algunos miembros de la familia se lleven del todo bien. En estos casos, nuestro objetivo es que la familia pueda convivir de forma cordial y respetuosa, sin mantener frecuentes discusiones, enseñándoos a relacionaros de otro modo que no sea la violencia verbal y/o física.

Por todo ello, en esta terapia vais a encontrar (1) límites, para que todos/as respeten la postura de todos/as, y (2) pautas de comunicación, es decir, formas distintas de relacionaros, más respetuosas y nada agresivas.

Se trata de que volváis a entenderos, y no os hagáis más daño, favoreciendo una convivencia lo más cercana posible.

Estas sesiones tienen una hora de duración y una frecuencia semanal al principio y después quincenal.

No olvidéis poneros en buenas manos. Recuerda que la Psicología Clínica es una ciencia, destinada a la evaluación, diagnóstico, tratamiento y prevención de las afecciones mentales. Por ello, debe ser realizada por profesionales debidamente cualificados y con experiencia, expertos/as en las técnicas que aplican y capaces de contener momentos difíciles en la terapia. En OrientaTerapia defendemos una buena práctica profesional.

TERAPIA ON LINE

Según la Asociación Norteamericana de Psiquiatría (APA) “la terapia online produce resultados clínicos equivalentes a los conseguidos en la terapia tradicional en consulta”.

Por tanto, es una solución válida cuando quieres ser atendido/a por un psicólogo/a pero no puedes acudir físicamente a su consulta.

En OrientaTerapia recomendamos este tipo de terapia cuando:

  • Vives en otra ciudad que no es Madrid
  • Vives en otro país que no es España
  • Existe una circunstancia grave que te impide acudir de forma presencial
  • No te encuentras en una situación de emergencia y/o crisis aguda.

Para poder ser atendido/a en esta modalidad de tratamiento, necesitamos que cumplas ciertos requisitos para garantizar una atención de calidad, que son:

  • Disponer de una buena conexión a internet.
  • Disponer de un espacio privado donde preservar la intimidad y la confidencialidad. Esto garantiza que nuestra intervención sea privada, algo fundamental para un proceso de terapia.
  • Disponer de un espacio sin interrupciones durante una hora.
  • Disponer de los dispositivos necesarios para tal fin: micrófono, webcam, auriculares, etc.

 

La psicoterapia online no es ni cubre servicios de emergencia y no puede ser grabada en ningún caso por ninguna de las partes.

Las sesiones tienen una hora de duración y una frecuencia semanal.

No olvidéis poneros en buenas manos. Recuerda que la Psicología Clínica es una ciencia, destinada a la evaluación, diagnóstico, tratamiento y prevención de las afecciones mentales. Por ello, debe ser realizada por profesionales debidamente cualificados y con experiencia, expertos/as en las técnicas que aplican y capaces de contener momentos difíciles en la terapia. En OrientaTerapia defendemos una buena práctica profesional.

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MINDFULNESS

¿Es posible un estado en el que la mente no esté reaccionando continuamente?, ¿puede la mente dejar de reaccionar, permanecer en el aquí y el ahora, inmóvil?”.

El Mindfulness o Atención Plena es una herramienta que ayuda a los pacientes a soportar el sufrimiento que atraviesan mediante ejercicios para controlar la ansiedad y mejorar la aceptación personal.

Esta técnica proviene del Budismo Zen y fue introducida por Jon Kabat-Zinn en 1976 como herramienta de terapia para tratar Trastornos Psicosomáticos. La primera validación empírica de este programa fue para el tratamiento del dolor crónico (Cebolla A., Miró M.T., 2008).

Más adelante, Kabat-Zinn extendió su uso para el tratamiento de Trastornos de Ansiedad y concluyó científicamente que era un tratamiento eficaz para ellos.

Su uso siguió extendiéndose para el tratamiento de la Psoriasis, la prevención de recaídas, el afrontamiento al estrés, etc. Actualmente es utilizado para un sinfín de dificultades y trastornos psicológicos.

Esta estrategia es distinta a los tratamientos psicológicos clásicos porque éstos ayudan a que la persona consiga eliminar, controlar, cambiar y/o sustituir sus pensamientos negativos por otros más deseables.

El Mindfulness es una alternativa que ayuda a la persona a generar una no-reacción ante esos pensamientos, una no-valoración de los mismos, y, por tanto, ayuda a una mejor gestión de las emociones más intensas. Esto favorece una mayor auto-aceptación de tales pensamientos. Esta mirada aporta serenidad y estabilidad ante las dificultades.

La actitud de la Atención Plena es la de dar la bienvenida y permitir, más que una necesidad por controlar, resolver y eliminar nuestras dificultades.

Básicamente, con esta técnica se enseña a los pacientes a permitir que los pensamientos, sentimientos y sensaciones “vengan y entren en la mente” sin vivirlos como algo insoportable y tortuoso.

Así, se desarrolla una habilidad para aceptar y tolerar los pensamientos y sentimientos difíciles, y alcanzar una sensación de gran calma y “paz de mente”.

En definitiva, se trata de ayudar a la persona a modificar cómo se enfrenta a su experiencia y cómo se relaciona con ella.

Como cualquier habilidad psicológica, requiere de entrenamiento, que debe ser gradual, progresivo y de práctica regular.